En diciembre de 2019, el mundo observó ansiosamente cómo cientos de terremotos azotaron Puerto Rico. Los temblores más pequeños finalmente culminaron en un poderoso terremoto de magnitud 6.4 que se sacudió con fuerza suficiente para dejar a más de 2,000 puertorriqueños en refugios, casi 1 millón sin electricidad y cientos de miles sin agua. La NASA se movilizó rápidamente para proporcionar datos satelitales de observación de la Tierra para apoyar la respuesta y la recuperación del desastre, recopilando información y coordinando con las partes interesadas, los socios universitarios y las agencias federales que lideran el esfuerzo de respuesta.
Dos años después del evento, las comunidades afectadas continúan en alta amenaza por peligros como deslizamientos de tierra, inundaciones o tsunamis. Para reducir este riesgo, el programa de Desastres de la NASA patrocinó una investigación colaborativa sobre las mejores prácticas para la evaluación de riesgos entre las comunidades vulnerables del suroeste de Puerto Rico. Esta evaluación de amenazas múltiples contribuye al Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres, un documento internacional que articula principios y objetivos para reducir el riesgo global de desastres y aumentar la resiliencia. Más específicamente, este proyecto cumple con la primera prioridad del Marco de Sendai: comprender el riesgo de desastres a nivel sistémico, lo que permite a las comunidades crear soluciones para la mitigación, adaptación, respuesta y recuperación de desastres.
Los científicos de la NASA están trabajando en estrecha colaboración con los administradores de emergencias locales y nacionales, los proveedores de productos y herramientas de datos, los expertos en peligros, las agencias de mapeo y los planificadores de conservación para garantizar la participación de la comunidad en el proyecto. Entre los colaboradores locales se encuentran el Dr. Allan Astorga, líder de la metodología SalveTerra , una firma de consultoría ambiental, y Para La Naturaleza , una organización sin fines de lucro con la sociedad en el centro de sus objetivos de conservación. La investigación tiene como objetivo recopilar la información de riesgo de desastres actualmente disponible para la región y combinarla con nueva información de riesgo de la base de datos de la NASA y otras fuentes confiables. Luego, utilizará la información agregada para crear un mapa de alta resolución que represente los peligros naturales y el riesgo de la población para 11 municipios en el suroeste de Puerto Rico.
Dado que Los recursos son limitados, saber exactamente dónde distribuir suministros de emergencia puede significar la diferencia entre la vida y la muerte para las comunidades afectadas por el desastre. Su mapa digital ayudará a los responsables de la toma de decisiones a determinar qué poblaciones corren un mayor riesgo de desastre antes de que ocurra un evento, lo que permitirá una dispersión más precisa y rápida de los suministros de emergencia y los planes de evacuación.
La NASA también se asoció con Navteca, una compañía que está explorando el potencial del software de video juegos para crear visualizaciones más inmersivas para ampliar los límites de la tecnología utilizada para desastres y mejorar la toma dedecisiones. Navteca está creando una versión 3D del mapa de evaluación de riesgos de Puerto Rico que permitirá a los tomadores de decisiones ver la región, completa con cuerpos de agua, terreno e infraestructura, y agregar capas de datos de riesgo según sea necesario. El objetivo es crear un mapa inmersivo que permita a los responsables de la toma de decisiones identificar áreas de altoriesgo de forma rápida y exhaustiva en caso de desastre. Colaborar con organizaciones de ideas afines permite a la NASA aprovechar los recursos y relaciones existentes para garantizar que los datos confiables se integren a la perfección en los planes locales de preparación, respuesta y recuperación de desastres.